miércoles, 15 de agosto de 2007
Querido hijo; mañana vienen tu abuela y tu tía a vernos, me imagino la sensación tan triste que tendrán al llegar y notar tu ausencia, siempre que venían deseando verte llenas de regalitos para su niño… y ahora solo verán una casa donde reina la tristeza. Cuando vinieron la última vez fue para tu cumpleaños y menuda impresión se llevaron al verte ya tan mal, tanta que nos acompañaron en tus últimos días, y después en los duros momentos que pasamos al vernos sin ti.
Otra vez se reúne la “comunidad del trapito” como tu las llamabas a las tres por su afición a ir de tiendas, no te imaginas como ello de menos tu humor irónico y risa fácil que tan bien se compaginaba con el mío, cuantas veces has tenido que salir corriendo al servicio por que no aguantabas más y yo callarme para no provocarte más risas, ahora cuando se me ocurre sacarle punta a algo lo primero que pienso en la pena que me da que no estés y luego me lo callo, tu madre no lo entendería como tu.
Bueno como te contaba se reúne la comunidad del trapito y me sentiré un poco aislado, al menos antes nos poníamos a charlar entre nosotros y tenía un “aliado” ahora solo me queda refugiarme en mis cosas, al menos tu madre estará más distraída y seguro que se van por las tardes a la playa ya que yo aun no me he atrevido a ir.
Ya te contaré.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)